Modelo Chino, Solución Pactada Y Otras ‘Guanajadas.’
Por: AlbertoLuzárraga
http:futurodecuba.org
Hace tres años publiqué un artículo que titulé Cuba: "¿Transición al Neo Fascismo? Conectando los Puntos’(http://www.lanuevacuba.com/archivo/luzarraga-27) Cuba: ¿Transición al Neofascismo? Alberto Luzárraga. http:futurodecuba.org).
Repasando hoy, lo que expresé entonces, le hallo la misma vigencia pero mucha más urgencia. En aquel artículo dije: "El fascismo, como sintetizó felizmente una persona con quien conversaba, no es sino comunismo privatizado. La cúpula técnica más joven, que no es lo mismo que Castro, sabe que los comités, asambleas, etc. no resuelven nada excepto dar empleo a los cotorrones ideológicos. El fascismo es más práctico. Selecciona a un buen empresario con pocos escrúpulos y frecuentemente le da un monopolio. Claro está, con carta blanca para que lucre con tal de que produzca. Eso incluye el "derecho" a explotar a sus trabajadores y la obligación de compartir sus utilidades con el régimen y sus funcionarios que así nutren sus cuentas extranjeras. La ley de inversión extranjera y las empresas mixtas fueron el primer paso y se lo vendieron al comediante en jefe como la única tabla de salvación."
El proceso se acelera y se intenta captar las mentes con propuestas que no son sino frases vacías, o slogans que tienen un origen sospechoso. No significa que todos los que las usan sean sospechosos pero si es justo decir que muchos no han pensado en este complicado juego de ajedrez más allá de la primera jugada y quieran que no caen en ‘guanajadas.’ Veamos la más común, la ‘solución pactada.’ En principio suena bien. Nos ponemos de acuerdo, no hay sangre y todos seremos felices. Es un claro ‘tiro’a la aspiración normal de todo ser humano y por eso tiene ‘gancho’ psicológico. Pequeño detalle: Un pacto serio y perdurable requiere por los menos dos partes equilibradas y bien representadas.
¿Cuáles serían las partes en esa ‘solución’ no pensada a fondo?
De un lado Lage, Alarcón, y comparsa (o sus ‘apoderados’ si hay que vestir la mona) y de otro una oposición que ellos han mantenido dividida y fragmentada, y por ello sin poder fraguar una verdadera unión ideológica. En criollo: esa es pelea de víbora contra víctima amarrada, porque la víbora sí tiene una ideología y es seguir disfrutando de sus bienes mal habidos y del poder. Si se requiere que la víbora aparente ser majá (no es venenoso) no hay ningún problema, y en eso andan algunos.
Para que existan dos partes legítimas se requiere un cambio a fondo en las estructuras del poder. Es lo que ha ocurrido en Europa Oriental, España, Chile, etc. Esos cambios usualmente no tienen una sola fase sino varias. En la primera fase se resquebraja el monopolio del poder, la oposición se organiza y se une en demandas comunes que usualmente son demandas de libertades. Sobre esas no inciden las diferencias ideológicas. La Asamblea de la Sociedad Civil en Cuba (cualesquiera sean las deficiencias que usted amigo lector quiera achacarle) es un primer paso en el proceso conducente a la primera fase.
En las fases que siguen, las fuerzas opositoras cobran cohesión, depuran o controlan los elementos infiltrados que SIEMPRE HAY (por eso se llama totalitarismo) y obtienen cada vez mayores concesiones de un grupo gobernante que sabe de sobra en que consiste el desastre creado. En buena parte conceden porque el apoyo exterior va condicionado a la democratización.
Y todo eso requiere el desalojo de la cúpula del poder y su sustitución por mandos medios que no estén enriquecidos ni tengan las manos manchadas de sangre.
Entonces tendríamos dos partes y no se negociaría con la cúpula del equipo que provocó el desastre. Eso sería una ‘guanajada’ clarísima pero lo notable es que los que manejan la frasecita de la solución ‘consensuada’ o ‘pactada’ usualmente no pasan de ahí. Parece que no les gusta precisar. ¿Será por aquello de no querer ‘pisarle los callos’ a nadie?
¿Como se produciría el cambio para que haya dos partes legítimas? Con exactitud no lo sabe nadie. Sólo hay un dato confiable. Los edificios ruinosos apuntalados por vigas carcomidas se derrumban y ahí empieza el proceso, a no ser que se les suministre a los autores de la ruina nuevas vigas y materiales. La cúpula del poder ha intentado hacer esto asociándose con capitalistas sin escrúpulos. En eso consiste el neofascismo que comentábamos. Apoyarlo sin pensar a fondo lo que se hace y se dice es ser ‘guanajo.’
Lo cual nos lleva al ‘modelo chino’que es simplemente la variante más exitosa del neo-fascismo. Esta por lo común nos la recomiendan ‘expertos’ no cubanos con muchos ‘papelitos’ lo cual de entrada me pone en guardia. Es que en mi vida profesional he conocido a infinidad de gentes sin ‘papelitos’ pero con una inteligencia natural plena de un notable sentido común, así como muchas personas con infinidad de títulos y poco sentido común. Con frecuencia disimulan su poco seso con actitudes condescendientes y nos dicen que preferirían otra cosa para Cuba pero que esta ‘solución’ es inevitable y hay que ‘resignarse. ’ Dicho lo cual se toman otro Martini.
Bajo este ‘modelo’ la comunidad cubano-americana asumiría el rol de los chinos residentes en el exterior que han proveído enormes cantidades de capital de inversión. La cúpula castrista se mantendría y ‘eventualmente’ (no hay plazos) ‘evolucionaría’ hacia la democracia. No hay que ser un genio para entender que esta solución darwiniana produciría una nueva versión de una dictadura tropical con el país repartido entre los amigos y socios de los mandones de turno.
Presupone otra guanajada, a saber, una evolución ‘benéfica’ sin dar una sola razón para explicar por qué una casta acostumbrada a gobernar sin frenos morales ni legales va a adoptar el estado de derecho y a gobernar sin enriquecerse. Además olvida hechos notorios:
Una cultura china que es milenaria y sostiene el nacionalismo chino para el cual el Reino Medio es el paradigma a considerar.
1200 millones de personas que es preciso alimentar y que constituyen el 20% de la población del planeta.
Una historia de poder absoluto y de terribles guerras internas cuando el poder absoluto se resquebraja. El desorden no es inevitable, pero el antecedente influye en las mentes.
11,000 Klm. de distancia entre Washington y Beijing. No existe una historia de relaciones estrechas entre ambos países.
El modelo chino es un libro sin terminar. No sabemos si el nacionalismo Chino va a tornarse virulento o no. Recientemente las declaraciones de un general chino sobre ataques nucleares a Estados Unidos si defendiesen a Taiwán, da bastante que pensar.
Los titulados expertos no cubanos que proponen el modelo chino para Cuba adoptan una actitud condescendiente. Para ellos los cubanos no son capaces de volver a implantar sus tradiciones y cultura occidental. Deben adoptar un modelo extranjero y distante, trabajar por salarios modestos, tener pocos o ningunos derechos laborales, aceptar libertades limitadas y resignarse con una modesta mejoría.
Y para colmo, aceptar todo esto a 90 millas de la economía mayor y la democracia más antigua del planeta. Más que guanajada esta es una idea fatalista y morónica. No somos ni tan mansos ni tan burros. Si Santo Domingo y América Central entran en Cafta, Cuba también. Falta el sentido común de que hablábamos, es obvio que CAFTA es indispensable e inevitable y que no calza con el modelo chino.
¿Y cuales son las otras guanajadas? Cualquier variante que piense que se puede negociar con los capomafiosi y salir bien parados, cualquier variante que piense que aceptar o intentar variar las reglas mafiosas llamadas constitución socialista es solución. No se modifican modelos fracasados. Se adaptan o restauran modelos exitosos. ¡Y vaya con el sentido común!
Como actuar: Aguantar firmes basados en la justicia y en principios sanos y probados. Apoyar todo aquello que conduzca a un cambio a fondo y no cosmético. Denunciar todo intento de neofascismo. Nada es eterno. Si alguien quiere ‘guabinear’ que entienda una cosa: el ‘guabineo’ cubano era producto de otro mundo y otra psicología. Si se dedica a ‘guabinear’ amigo, se lo van a merendar.