Por Juan Vives


Con Hugo Chávez se puede esperar cualquier cosa,pero muchas veces la realidad del loco de Caracas sobrepasa hasta las más descabelladas historias salidas de un cerebro calenturiento.

El mundo entero se sorprende con la historia que Chávez ordenó desenterrar a Simón Bolívar,para que se efectuara una autopsia póstuma para determinar de manera precisa las causas de su muerte.Resulta una idea descabellada,después de tantos años de su muerte,no hay medicina legal capaz de determinar las causas de la muerte de nadie.Podrán emplear todos los avances de la ciencia y no se sacará nada en claro.

La idea en si resulta incoherente y es necesario buscar en otros horizontes que los históricos para encontrar la respuesta a tal desatino.

Aquí es donde vienen los descubrimientosque confirman que el tipo está loco de remate.

Cuando el fállido golpe de estado,entre lloradera y lamentos pidió que lo mandaran a Cuba.Al mulato le gustaban las historias de Santería y sin pensarlo dos veces comenzó a frecuentar círdulos de santería,desde luego,controlados por la seguridad cubana,que vieron en esto otra manera de controlar al aprendiz de dictador.

Lo hicieron caballo de santo y se hizo « hijo de Changó »,de ahí su fuerte devoción por el color rojo y sus ridículas camisas de ese color.En todos sus viajes oficiales está acompañado de tres cubanos santeros que son de cierta manera sus super consejeros espirituales.

Bueno hasta aquí la historia es sorprendente,pero lo mejor está por venir.En Cuba también lo « rayaron en palo » y el cuarto cubano que siempre lo acompaña en los viajes es su padrino de palo.

Este le aconsejó que para poder hacer un trabajo fuerte que le garantizara el poder definitivamente,tenían que hacerlo con los huesos de Simón Bolívar !ALELUYA ! Dicho y hecho,las órdenes presidenciales de desenterrar el caudillo fueron dadas con pretexto de una autopsia,en realidad es para que su palero personal trabaje los huesos para asegurarle el poder.
DE QUE LOS HAY LOS HAY,PERO HAY QUE DAR CON ELLOS.